Dicho y hecho. Quedamos en Pontevedra y allí nos vimos. Fue una boda galega en toda regla esta de Bea y Juan Carlos, 12 horas mas la juerga del día antes, marisco, carne, marisco, pescado, marisco y almax, espero. Un gran día para una pareja que lleva toda la vida y lo que les queda. Una jornada intensa de trabajo pero muy gratificante por la emoción, la felicidad, las risas y la gran cantidad de familia y amigos que disfrutaron ese día con este pedazo de pareja. Los sentimientos, la nobleza y la bondad de estos dos chicos se contagiaron en mis fotos. Mil besos y abrazos a los dos, bueno y a los antiguos alumnos y clientes que allí me encontré, también a la madre de la novia eh que no paro de cuidarnos a mi compi y a mi!!!
Espero que os gusten,Alejandro Almeida.